06 Oct
06Oct

Hace unos años escribí un trabajo dirigido exclusivamente a los Astrólogos, pensando en que les puede resultar muy útil para ayudar a sus clientes en los momentos delicados, cuando solo un buen consejo no basta...

Como astrólogos nos encontramos en muchas ocasiones con consultantes que están atravesando un "mal tránsito". -Todos hemos tenido alguna vez ante nosotros a una persona con un mal tránsito de Plutón, en el que se aprecian estados de ansiedad y depresión, o sentimientos de muerte, o muertes de personas próximas, o enfermedades graves que preocupan hondamente a nuestro cliente.

Igualmente, nos hemos encontrado con personas con tránsitos tensos de Neptuno, con las consecuentes sensaciones psíquicas de engaño, neurosis depresivas, inquietudes mórbidas, atmosfera ilusoria o ficticia, impresión de hundirse sin esperanzas o de no poder salir de la situación. También nos topamos con personas que están pasando tránsitos tensos de Urano con sus sorpresas inesperadas, que causan desconcierto, o cambios terribles a los que se debe adaptar nuestro cliente.

De igual forma vienen personas a nuestra consulta con tránsitos depresivos de Saturno en las que sienten frustraciones deprimentes, fracasos, sentimientos de humillación y toda una serie de calamidades.

Del mismo modo, nos enfrentamos en consulta con tránsitos de Marte con sus correspondientes sensaciones incómodas, alteraciones nerviosas o tensiones y crispaciones. ¿Qué puede hacer un astrólogo ante un tránsito penoso, aparte de aclarar el problema o dar un buen consejo? Hasta ahora, nada o bien poco. Con la aplicación de la terapia floral de Bach, aparte del buen consejo o la aclaración de su problema desde el punto de vista astrológico, podemos ayudar de manera activa.

Desde la terapia floral, se afirma que la parte más delicada del ser humano no es el cuerpo, sino la personalidad, las emociones. Antes de enfermar a nivel orgánico, se producen desajustes emocionales. Dice Bach que averiguamos nuestra personalidad en función de la posición de la Luna en el momento de nuestro nacimiento, para él, los astrólogos otorgamos un valor exagerado a los planetas y le da un valor fundamental a la Luna que la asocia con la personalidad y las alteraciones de la salud, igual que decía Ben Ragel. La parte original de su terapia, es que la aplicación de las flores está ligada al tipo de personalidad. Luego añade las flores para los estados transitorios, que nosotros, como astrólogos, asociamos a los tránsitos pesados o de cierta duración.

Muchos se preguntarán que relación puede existir entre el sistema terapéutico de Bach y la astrología. Para no alargarme con disertaciones explicativas que unan ambas disciplinas, me remitiré a Bach y veremos las concomitancias.

El Dr. Bach, creador de la terapia floral, era un médico inglés que se sintió insatisfecho con los métodos ortodoxos, se interesó por la inmunología, descubrió vacunas de aplicación agresiva o dolorosas, que tampoco le convencieron plenamente y continuó trabajando con otro tipo de vacunas homeopáticas que se siguen utilizando hasta ahora, más tarde desarrolló sus remedios florales a través de sus trabajos en la homeopatía. Los remedios florales se asemejan a la homeopatía y se asocian con las energías que se canalizan con la acupuntura.

En su publicación de 1932 «Libérate a ti mismo» en el capítulo 11, Bach dice que: «Los astrólogos que han investigado las estrellas, y los homeópatas que han estudiado las plantas han buscado desde siempre el remedio que nos ayude a mantener nuestra salud y nuestra alegría de vivir.» En sus conferencias cita conjuntamente a Hahnenmann – padre de la Homeopatía- y Paracelso, y aplica a su sistema curativo los principios de estos maestros.

Dice Bach. «Paracelso y Hahnemann nos enseñan a no prestar excesiva atención a los detalles de la enfermedad, sino a tratar a la personalidad, al hombre que lleva dentro, en el convencimiento de que la enfermedad desaparece cuando nuestro ser espiritual y mental se encuentran en armonía.» Al igual que sus trabajos partieron desde la homeopatía, es indiscutible que también tiene un componente astrológico, tanto a nivel simbólico y de ordenamientos como absolutamente práctico y objetivo, como lo demuestran sus primeras clasificaciones sobre los doce remedios, las doce cualidades humanas, los doce errores y las doce virtudes que componen su sistema original. Luego añadiría los siete remedios menores.

Cuando afirmo que Bach tuvo en cuenta la astrología, no quiero decir que se dedicara de manera cotidiana a levantar temas natales, pero sí que la tuvo muy presente y que la aplicaba hasta en las recogidas de esencias florales. Como lo expone en su publicación de 1930 en Homoeopathic World, dice: "Todavía tenemos mucho que aprender en lo que respecta a la recogida de las plantas medicinales y la elaboración del remedio. Debemos ocuparnos de muchas cuestiones si queremos cosechar el mejor resultado y no nos conformamos con uno mediocre. Tenemos que ocuparnos con más profundidad de la situación natural, de la edad, del estado y de la parte de la planta que vamos a utilizar, de la influencia de los planetas..."

Evidentemente, aquí está aplicando la astrología. También lo hace y de manera muy directa después de hablar de las doce cualidades o las doce grandes lecciones de la vida . Dice en su trabajo sobre Los remedios florales y sus indicadores», publicado en 1933: "Aunque debemos aprender todas esas lecciones, concentrémonos en una determinada. Esta lección viene fijada por la posición de la Luna en el momento de nuestro nacimiento, indicándonos cuál es la meta principal de nuestra vida".

Por otro lado, dice que: «Para encontrar el remedio que nos pueda ayudar, debemos encontrar primero la meta de nuestra vida, el objetivo al que aspiramos, y entender las dificultades de nuestra existencia».

Como ayuda para encontrar esa meta u objetivo y reconocer las dificultades particulares, la astrología es sin duda el mejor instrumento, usado por Bach, aunque les pese a cierta clase de psicólogos. Continúa Bach diciendo que «Debemos adivinar que batallas podemos soportar y a qué enemigo intentamos vencer especialmente, entonces podremos recoger la planta que es apropiada para ayudarnos a vencer.»

De aquí se podría extraer que el paso previo al uso de una flor requiere una información, que la astrología, bien aplicada, puede aportar con más facilidad que otras disciplinas.

Pero no es solo eso, se puede afirmar que su filosofía y su pensamiento es muy similar al que se desarrolla a través de la astrología. También en las disertaciones de Bach se muestra a veces ese lenguaje de las estrellas y hace alusión directa al tema.

En el capítulo 7 de -Libérate a ti mismo – dice: «Nuestros errores no se fundamentan en nuestras estrellas, sino en nosotros mismos» . Que es lo mismo que decir que «astros inclinan pero no obligan», entraría, pues, dentro del pensamiento astrológico no determinista.

De todas maneras sería injusto rebajar a Bach o limitarlo con las redes de Urania, pues él se eleva y transita por la esfera mística de Neptuno. Vive todo un periodo de gnosticismo real en el que percibe que el individuo ha de salvarse mediante la conciencia divina y llega a decir: «Una vez hayamos reconocido nuestra divinidad, se hace todo mas sencillo». Nos sorprenderemos aún más si analizamos en que se basa Bach para fundamentar su terapia floral, dice textualmente: "Este sistema de curación, que se nos ha revelado divinamente..."

O cuando afirma que: «La sanación está por encima de todas las cosas materiales y de cualquier ley. Es de origen divino y, por eso, no puede estar sujeta a cualesquiera de nuestros convencionalismos.». -Por ello todas las mentes muy racionales, con predominio de Mercurio, sienten un profundo rechazo por su método de sanación.

Pero también sería incorrecto encasillarlo en esa octava incierta y nebulosa de Neptuno, reino de Da’ath. – En el tránsito de Urano oposición, Urano, sobre los 43 años, sorprendiendo a sus compañeros, abandona la logia masónica a la que pertenecía y se dirige al encuentro con la naturaleza. – Bach va más allá del todos somos Uno y traspasa la esfera de Plutón, percibe que toda la naturaleza y el Cosmos forman una sola Unidad armónica. Así que Bach, además de un científico, tenía conocimientos de astrología, era un místico y un ecologista.

Para nosotros los astrólogos debe ser una puerta que se abre para permitir realizar mejor nuestra labor de ayuda. -Esa era sin duda la intención de Bach, pues su sistema curativo fue creado para que lo utilizasen diferentes tipos de personas, dice Bach: «Para aquellos que siempre han soñado con el ideal de liberar a la humanidad de su padecimiento». -Y en este grupo entran todo tipo de sanadores, incluyendo a los que utilizamos la astrología. Con esto debe quedar claro que no es la intención de este trabajo exclusivizar a Bach y mucho menos porque estoy de acuerdo con su filosofía, que dice que «Lo peor de todo es la ambición de poseer otra persona».

Visto en Tito Macia

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