Seamos sinceros y realistas: interpretar una Carta Natal no es fácil.
Si la Carta Natal refleja la estructura energética y psíquica de la persona, descifrar ese mapa particular y único de cada uno no puede ser una tarea sencilla. ¡Ni mecánica!
Se asemeja realmente a la labor de un artesano.
Por esta razón, es imprescindible aprender bien Astrología.
Pero aún creyendo que uno está aprendiendo bien Astrología y sabe, podemos cometer algunos errores en nuestra labor como Astrólogos.
Según mi experiencia, estos son los 7 problemas o errores principales en los que cae el estudiante de Astrología y el no tan estudiante…
Entre tú y yo… diría que el 95% de los Astrólogos de hoy día comete alguno de estos errores.
Yo también incurrí en todos y cada uno de ellos.
Es fácil caer en ellos y parece que hay que pasar por ahí…
¡Estáte alerta!
Al principio parece ir todo bien y entiendes las diferencias entre los 12 Signos, Aries, Tauro, Géminis, Cáncer, Leo, Virgo, Libra, Escorpio, Sagitario, Capricornio, Acuario y Piscis.
Y de los Planetas, el Sol, la Luna, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno.
Te sientes capaz de interpretar Planetas en Signos, como por ejemplo, Marte en Tauro o Mercurio en Leo.
Pero a medida que tienes más conocimientos —signos, planetas, casas, aspectos… ¡ay, los aspectos! — empiezas a mezclar las cosas y ya no ves con claridad qué diferencia hay entre Luna en Cáncer y Luna en Casa 4, por ejemplo.
Si introducimos los Planetas Transpersonales la confusión crece sobremanera, puesto que en realidad tienes una interpretación más mental que real de su energía y función.
Además, unos libros indican una cosa y otros otra, por no hablar de lo que uno se encuentra por Internet…
La confusión se apodera de ti en cuanto juntas varios rasgos astrológicos a la vez (un planeta que está en un signo y en una casa y que aspecta a…)
Las ganas de avanzar hacen que creas entender un planeta o signo o combinación de rasgos astrológicos y pases a otro, sin realmente comprender a fondo cómo funciona.
En definitiva, estás lleno de conceptos teóricos que no sabes aterrizar y llevarlos a la práctica (interpretar una Carta Natal y personalizarla).
RESULTADO: Te lías y acabas con un saco lleno de dudas y con confusión
Algunos creen que el problema se solventa estudiando más… en vez de cambiar la modalidad de aprendizaje.
MORALEJA: Si no tienes los conceptos básicos claros e identificados por ti mismo (a través de una experimentación vivencial), es muy fácil perderse en la interpretación de una Carta Natal.
Este es uno de los errores más comunes. ¡Y uno de los más peligrosos!
Astrólogos con muchos años de experiencia están inmersos completamente en este error.
¿En qué consiste?
Lo que entiendes lo agrandas,
y lo que no entiendes lo ignoras.
Si no comprendes el significado de Júpiter en Aries, o de Saturno cuadratura Neptuno, o de la Luna en el Medio Cielo, lo omites.
Esto es un grave error ya que puedes estar descartando una información importante.
O lo que es peor, actuando así tienes un enfoque distorsionado de la persona o de ti mismo, puesto que te estás quedando con sólo una parte de la Carta Natal.
CONSECUENCIA: emites mensajes contradictorios y la Astrología que aplicas pierde eficacia y autenticidad.
Y si el ego está presente, querrás justificar lo que afirmas… querrás justificar algo que no considera la totalidad, querrás justificar algo que no funciona.
¡Terrible!
¿Y por qué además es uno de los más peligrosos?
¡Porque no te das cuenta de que caes en este error!
Repito, lo que entiendes lo absolutizas o agrandas, y lo que no entiendes lo ignoras.
“No, este error sí que no lo cometo”
Cuidadín con decir esto rápidamente, este es otro error “5 estrellas”.
¿Qué es proyectar? Proyectar consiste en ver en el otro lo que hay en uno mismo. Ver afuera lo que vives adentro.
Este mecanismo de proyección (así es como se denomina en Psicología) es inherente al ser humano, y hay que vigilarlo muy muy muy de cerca, como hacen los árbitros de baloncesto con los jugadores.
A su vez, tiene una consecuencia que se cuela en nuestra actividad astrológica:
Lo que tú vives como “malo” crees que también es “malo” para los demás.
Y lo que tú vives como “bueno” crees que también es “bueno” para los demás.
¿Pero quién te crees que eres??
A menudo no nos creemos dioses, pero actuamos como dioses cuando proyectamos.
Seguro que detectas este error en muchos Astrólogos.
Mucho ojito para no caer nosotros mismos en este “desliz” sibilino.
Y así todos los rasgos astrológicos.
Seamos más asépticos y constructivos ante una Carta Natal.
Estás delante de una Carta Natal que tiene Sol en Géminis y Ascendente Leo. Hmmm… te viene a la memoria la carta de Donald Trump, un Sol en Géminis con Ascendente Leo.
Y entonces generalizas y dices “Eres como Donald Trump, un conquistador insaciable”.
¿Todos los Géminis con AC Leo son iguales?
Trump tiene Luna en Sagitario, tu cliente no.
O imagina que sí…, da igual, no tendrá el mismo Marte.
O imagina que sí…, que tiene el mismo Sol, Ascendente, Luna y Marte, da igual, no tendrá el mismo Venus.
O imagina que sí…, da igual, no tendrá el mismo…
Tu cliente y Trump no tienen la misma Carta Natal, ¡y no ha vivido lo mismo que Trump! Así que toda interpretación generalista está abocada al error.
Y este error común está enlazado con el siguiente…
¿Seguro?
¿La Carta Natal es lo importante? ¿Es lo más importante? ¿Es incluso lo “único”?
Es posible que en más de una ocasión hayas olvidado que lo importante no es la carta sino la persona.
Sí, yo también he caído en este error: “A ti te pasa esto, lo tienes aquí, en este aspecto de oposición.”
Han pasado muchos años de ello, pero aún me sonrojo…
¿Afirmar esa frase ayuda algo?
La Astrología tiene muchas vertientes (predictiva, psicológica, transpersonal, etc), pero no creo que ninguna de ellas que esté enfocada al individuo tenga el propósito de ajustar la realidad a un papel.
Ese papel pretende recoger la realidad, ¡no olvidemos esto!
La Astrología, en su rama Transpersonal, pretende acompañar a las personas en su camino de Realización individual. Lo que importa es que veas lo que está ahí y antes no veías, y en ese darte cuenta, avanzar en tu Autoconocimiento, crecimiento interior y expresión de tu Ser más profundo.
¿Qué nos sucede como Astrólogos?
Que comenzamos por interpretar rasgos y nos sentimos bien por ello. Saber y demostrarnos que sabemos puede ser una fase del aprendizaje, pero quedarnos ahí no nos permite avanzar.
CONSECUENCIA: No eres capaz de percibir las temáticas que necesita comprender e integrar la persona de su Carta Natal. Ni su camino de vida, ni su vocación, ni su forma de relacionarse, ni su infancia, ni su momento actual.
Este error lo podemos titular de otra forma: “cuando la Astrología es un fin en vez de un medio”, o “cuando dejamos de escuchar al consultante”.
Desde mi punto de vista, la Astrología debe servir para conocer, comprender y ayudar. Es una actividad de servicio.
ESCUCHEMOS primero a la persona antes de contarle nuestra interpretación.
Y si no la podemos escuchar, supongamos en vez de encasillarla o condenarla.
No sé tú, pero a mí me parece más sano
“¿Por dónde empiezo a interpretar?”
Versión 1: La ansiedad se apodera de ti y no sabes cómo apartarla de tu vista
Seguro que reconoces esa sensación desagradable que recorre todo tu cuerpo cuando estás ante una nueva Cartatal que debes analizar.
Sí, ese sudor frío… Y ese bloqueo que no sabes por dónde empezar…
Al ver tanta línea dibujada en la carta te agobias y se te nubla la vista.
“Te lo sabes todo”, pero a la hora de la verdad no eres capaz de prestar atención adecuada a los detalles de la carta.
Por no hablar de que ya es un sueño percibir a la persona que hay detrás de la carta…
La ansiedad proviene de la inseguridad, y la inseguridad proviene de que nadie te ha preparado para ser Astrólogo.
Es absolutamente falso que tengas que convivir con estas sensaciones, y que se te quitan con el tiempo o la práctica.
Conozco a muchas personas que tras años de práctica siguen teniendo inseguridad a la hora de interpretar. Siempre les queda la duda.
¿Por qué? Porque no aprendieron bien. O porque simplemente no aprendieron.
Versión 2: Ansiedad controlada y vas paso a paso, hasta…
Comienzas por el Sol, por el Sol en Libra, persona amable, simpática, que aprecia la belleza y lo armónico.
Y sigues con Sol conjunción Venus, porque sabes que Venus rige Libra. ¡Genial! Todo va bien. Esta persona es muy Libra.
Pero… ¡el Sol se encuentra en la Casa 12!
Aquí empiezas a tragar saliva… y te lo saltas y vas a otro rasgo, y te encuentras con Sol oposición Urano. Glup.
“Si es que tenía que haber comenzado por la Luna. Venga… Voy. Luna en Capricornio en Casa 3 con Plutón. Y en cuadratura con Urano, otra vez Urano…”
“Hmmm… ¿A ver el Ascendente? Escorpio… podía tener este chico un Signo más tranquilito…”
Y así sucesivamente. Vas teniendo un diálogo interno que da constantes saltos.
¿Te suena de algo?
Todos hemos pasado por aquí.
En el fondo, te falta un orden de interpretación fiable, completo y lleno de sentido.
Ningún libro te da los pasos que hay que trazar para ir entrando poco a poco en la Carta Natal y captar a la persona.
Como mucho te dan un esbozo que resulta insuficiente.
Sin orden ni guión de interpretación no se llega a ninguna parte.
La intuición está muy bien, pero es efectiva cuando se ubica dentro de un contorno ordenado.
Es más, a mayor organización, mayor espacio para la intuición.
Juntos (hemisferio izquierdo y derecho del cerebro) nos llevan a la comprensión del Alma que reside en esa Carta Natal.
El síndrome del estudiante.
“Cuanto más sepa de esta Carta Natal, cuanto más me la estudie, cuanto más detalles analice, más entenderé.”
¡O no!
Seguro que lo sabes, pero vuelves una y otra vez a este error: Comprender una Carta Natal no se consigue con el análisis técnico.
¿Qué ocurre cuando te conviertes en un traductor de símbolos abstractos y quieres saberlo todo?
Sintetizar es dar una visión global a todo,
conjuntar todas las partes y afirmar que “Este individuo vive así y le pasa esto”.
La mente es necesaria para interpretar, pero la percepción, intuición y sensibilidad también.
En la mente queremos entender todo y nunca finaliza nuestra tarea, y acabamos perdidos en el bosque, perdidos y exhaustos.
Déjame decirte una cosa: no sólo no puedes saber todo sobre una Carta Natal, es que además es ridículo e innecesario.
Suelta la mente para poder penetrar en el corazón de la persona que está reflejado en ese mandala perfecto.
Tanto este error como los anteriores te llevan a desconectarte de la persona, perdiendo la humanidad que requiere el uso de la Astrología para el Autoconocimiento y Desarrollo Personal.
La confianza inicial que adquiriste tras leer algunos libros de Astrología y hacer incluso algunos cursos, se desvanece… y bajas de la nube.
Algunos de estos 7 errores se cuelan en silencio cuando te lanzas a interpretar una Carta Natal, sea la tuya o la de otras personas.
Frustración, las cosas no progresan como esperas y te sientes atascado como Astrólogo.
¿Estaré interpretando bien este Marte en Libra en cuadratura con Júpiter? ¿Y cómo cambia su significado si el Ascendente es Aries? ¿Qué significa el Tránsito Neptuno oposición Luna? ¿Y Saturno en el Ascendente de la Revolución Solar?
Dudas, dudas, y más dudas. Nunca tienes la certeza de que vas por el camino correcto, de que lo estás haciendo bien. Incluso hay un poco de miedo por decir algo que no es.
Desilusión, porque te gusta mucho la Astrología y sentir la capacidad de interpretar cualquier Carta Natal y ayudar a las personas, pero pensabas que esto iba a ser más fácil.
Con tu Carta Natal te pasa lo mismo. Te da la sensación de que has llegado a un tope de Autoconocimiento. Sin embargo, intuyes que hay mucho más por descubrir y mejorar.
Para cambiar una situación es necesario conocer qué está pasando.
Aplícalo a la Astrología o a cualquier ámbito de tu vida, siempre funciona.
Ahora que conoces los 7 errores en los que puedes estar incurriendo como Astrólogo, comienzas a tener el poder de transformar la situación y dejar de cometerlos.
Tienes 2 opciones: hacerlo tú solo o acompañado.
Intentar corregir esos errores para dejar de sentir esa frustración y desasosiego, o buscar un mentor que te pueda ayudar y orientar.
Si tomas la decisión de hacerlo tú solo, ¡mucho ánimo!, pero sé muy sincero contigo mismo, que a menudo nos trampeamos.
Si tomas la decisión de buscar ayuda, ¡perfecto!, pero asegúrate de encontrar la ayuda que tú realmente necesitas.
Aquel que ha pasado por las mismas dificultades que tú y las ha superado es el guía que necesitas, el Astrólogo experimentado que te lleva a lo esencial de las cosas, paso a paso, y le puedes consultar todas tus dudas.
Sólo así conviertes la Astrología en una reveladora herramienta de Autoconocimiento y Desarrollo Personal, y tú en un servidor lúcido de tu luz y la de los demás.
¡Turno de reflexión!
¿Qué errores más comunes has visto en los Astrólogos?
¿Hay alguno que cometes de manera especial?
SermasYo