12 Nov
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La fecha de nacimiento predice nuestro estado de salud a lo largo de los años: la temporada en particular tendría una influencia predictiva sobre el riesgo o no de contraer enfermedades. Por ejemplo, los sujetos más saludables parecen nacer en mayo, los menos afortunados, en octubre.

Un amplio estudio en la Universidad de Columbia en Nueva York identificó coincidencias significativas entre el mes del año en que nació y la predisposición a una serie de enfermedades. Publicado en el Diario de la Asociación Americana de Informática Médica, el estudio utilizó un algoritmo que calculó las coincidencias entre los nacimientos de 1,7 millones de personas durante un período de 28 años y la presencia de casi 1,700 enfermedades.

'Al principio, todos se mostraron escépticos o se rieron', dice uno de los autores del estudio, Nicholas Tatonetti, investigador del Centro Médico de la Universidad de Columbia: 'Pero esto no es astrología: la estacionalidad transmite los factores ambientales variables presentes en el momento del nacimiento »Dice Tatonetti,« y estamos aprendiendo más sobre el gran papel que juegan el medio ambiente y las interacciones gen-ambiente en nuestro desarrollo. Esta podría ser una manera de comenzar a mapear los efectos del medio ambiente en nuestra genética '.

Los meses y los resultados de la investigación

De los resultados, la noticia más reconfortante llega precisamente para los nacidos en los meses de mayo a agosto: tendrían la menor tendencia a cualquier tipo de patología. Si bien son mucho menos afortunados los que tienen cumpleaños en octubre: los nacidos en octubre sufrirán la salud más frágil de todo el calendario, con una marcada tendencia a enfermedades mentales como el déficit de atención y el trastorno de hiperactividad. Sin embargo, para los nacidos en marzo, los riesgos parecen estar relacionados principalmente con las enfermedades cardiovasculares, mientras que los que tienen su cumpleaños en diciembre se verían más afectados por trastornos respiratorios.

Cómo los factores ambientales pueden influir en la salud

Por supuesto, los mecanismos detrás de este fenómeno son poco conocidos. Los cambios en la dieta y las oleadas anuales de infecciones podrían afectar el crecimiento del desarrollo del niño, con un efecto persistente en su salud durante las siguientes décadas. También puede estar expuesto a diferentes tipos de alérgenos durante diferentes temporadas. Cuando se trata de la visión, por ejemplo, algunos estudios han demostrado que los períodos de oscuridad ayudan a regular el crecimiento del globo ocular. Así, los niños nacidos en invierno tienen menos probabilidades de usar gafas. Luego está la vitamina D, que se produce cuando la piel está expuesta al sol.

Análisis previos sobre este tema

Hacia fines de la década de 1990, por ejemplo, Leonid Gavrilov, de la Universidad de Chicago, había descubierto que las personas nacidas en otoño tendían a vivir más tiempo. Desde entonces, ha confirmado su tesis con muchos estudios diferentes sobre los centenarios; Su última investigación mostró que los niños nacidos en el otoño tienen un 40% más de probabilidades de alcanzar los 100 años que las personas nacidas en marzo.
Sreeram Ramagopalan, de la Universidad de Oxford, examinó los registros médicos de casi 60,000 pacientes en Inglaterra, y mostró que los niños nacidos en invierno y en primavera suelen tener más riesgo de esquizofrenia, depresión y trastorno bipolar.

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