Venus, el buscador de la armonía y el complemento, parece que debería estar a gusto en el elemento agua, el ámbito de los sentimientos. Pero, ¿es así realmente?
Desde la energía, podríamos decir que sí: no hay mejor “pegamento” para una relación que el compartir emociones íntimas y profundas.
Pero, desde lo psíquico, la persona con Venus en Cáncer, Escorpio o Piscis, puede encontrar a veces dificultades a la hora de relacionarse o expresar sus sentimientos.
No por falta de sensibilidad, sino por exceso…
Venus en los signos de agua no querrá airear lo que siente ante cualquiera.
Tenderá a auto-protegerse, a ser tímida, y solo se sentirá cómoda en ambientes que le sean muy familiares.
Para esta Venus, los sentimientos serán de la máxima importancia, y demasiado vulnerables para exponerlos ante un público curioso.
Venus busca nivelar, armonizar, equilibrar… Quiere conciliar los opuestos, que haya paz. Y que esta sea visible y objetiva. No por nada, Venus en el zodiaco rige signos de aire y tierra.
Pero el agua puede ser turbulenta y oscura. Su naturaleza es fluir y, si se estanca, puede producir insatisfacción. Pero, si corre desbocada, genera inseguridad.
Por eso, Venus en agua puede vivir una lucha interna por intentar nivelar lo que siempre está fluctuando, o por aparentar mostrar una calma superficial que esconde corrientes profundas de emoción.
¿Qué mostrar de mi interior y qué ocultar? Si realmente digo lo que siento, ¿lo aceptarán?
Venus en agua anhela el contacto afectivo intenso y sin fisuras.
Cuando se entrega, lo hace de verdad, en cuerpo y alma.
Y espera que el otro haga lo mismo. Pero no todas las personas están dispuestas a formar este tipo de vínculos.
Para esta Venus, se impone la cautela: es necesario ser muy reservado y no mostrar demasiado hasta comprobar que las intenciones de la otra persona son las correctas.
Las relaciones de pareja que establece Venus en agua suelen ser las más profundas, porque están basadas en compartir lo más íntimo y delicado: las emociones.
Casi podríamos decir que, si no hay algo que despierte la compasión, no habrá relación: Venus en agua no se siente atraído por personas que muestran demasiada seguridad o autosuficiencia.
Más bien, se sentirá atraído por alguien con quien se pueda sostener mutuamente, y que sea tan respetuoso con la vulnerabilidad del otro como lo es ella misma.
El agua busca la fusión y la protección, y entonces la pareja pasa a ser un refugio para resguardarse de la hostilidad del mundo exterior.
Veamos cómo se comporta la persona con Venus en cada uno de los signos de agua.
Venus buscará el calor protector del hogar. Buscará una pareja que le proporcione una identidad, sentir que pertenece a un grupo familiar que le sirve de apoyo ante el mundo. Los gustos serán hogareños y conservadores, incluso muy apegados a la tradición y al pasado. Más que los roles sexuales masculino-femenino, dentro de la pareja se irán consolidando, con el tiempo, los roles padre-madre. Las personas con Venus en Cáncer tienen una necesidad especial de dedicarse a los seres queridos más cercanos, en especial a los padres y a los hijos. Es esencial la armonía en el hogar para sentirse reconfortados y cómodos.
Se busca la fusión con la pareja, hasta el punto de considerarse uno con la otra persona. Puede ser el más leal de los amantes, incluso haciendo grandes sacrificios para conseguir que la relación funcione. Pero, como es habitual en este signo, la exigencia es grande y, si se sospecha que la confianza depositada en la pareja puede ser traicionada, el conflicto está servido. Escorpio siempre atesora una gran intensidad emocional, a la que hay que aprender a dar cauce para no desembocar en conductas posesivas, celosas, o manipuladoras. Las relaciones, con Venus en este signo, pueden funcionar muchas veces como el catalizador que lleva al individuo a transformarse y utilizar su poder con fines curativos.
El problema de Venus es el de la extrema idealización. Venus en este signo se entrega al 100% a un ideal de amor que no siempre está a la altura de la realidad. Las necesidades de dar ayuda y afecto no se limitan a la familia o a la pareja: la compasión de Piscis no conoce limitaciones, y quiere extenderla a todo lo viviente. A través de la pareja, Venus en Piscis encuentra un trampolín hacia lo espiritual y lo trascendente… y su deseo es compartir estos mundos sutiles en el ámbito de la relación. Esto puede ser un inconveniente si la persona que está con ella no comparte del todo estas aspiraciones tan altas pero, en ocasiones, tan poco realistas.
Como podemos ver, no hay posiciones buenas o malas en la carta natal. La Astrología psicológica y transpersonal nos señala que cada rasgo de la carta es un banco de pruebas para nuestro autoconocimiento y desarrollo personal.
Y Venus en signos de agua no siempre es una panacea para las relaciones, como podría parecer.
Requiere trabajo, comprensión y aceptar que no todas las personas pueden ser emocionalmente compatibles con nosotros, a pesar de las ganas (y cualidades) de esta Venus para compadecerse y curar el dolor emocional de otros.
Con desarrollo personal, Venus en Cáncer puede extender su influencia protectora y maternal más allá del círculo familiar, y ganar en confianza y seguridad ante el mundo exterior.
Venus en Escorpio puede aprender a sacar todo el jugo de las relaciones, compartiendo mientras ésta dure, y aceptando las pérdidas como parte necesaria de la transformación y el crecimiento personal.
Y Venus en Piscis puede aprender que la “magia” de la relación está en el aquí y ahora y que, a través de esta, puede acceder a lo trascendente sin olvidarse de los aspectos materiales de la vida.
En todos los signos de agua, Venus da el don de ser capaz de ponerse en la piel del otro, comprender sus circunstancias y sus problemas, estar receptiva a sus emociones y encauzarlas de manera sana hacia el bienestar interior.
Un tesoro para terapeutas y sanadores.
¿Tienes Venus en Cáncer, Escorpio o Piscis en tu Carta Natal?
Cuéntanos en los comentarios cómo vives esta energía en tu vida.
Gustavo Capece