Signo: Tauro/Sagitario, Venus/Júpiter
Resumen del tema: El espíritu como función, negocios "new age" (lo espiritual como producto), comprar su felicidad, la secta.
A. EL PROBLEMA (Como carta sola o primera)
Esta a punto de comprar visiones importantes (o venderlas a alguien más). Esto significa que la propiedad espiritual que lleva consigo no le pertenece en realidad, pues no ha iniciado aún el viaje por el alma. Eso que posee es aun una pieza de mercadotecnia que usa como decoración del ego.
B. EL CAMINO A TRAVÉS DEL PROBLEMA (Como carta en serie)
Tener nuevas visiones usualmente requiere liberarse de algo (de valor) que estaba atrapado dentro de usted o que mantenía cautivo. El viaje requiere un sacrificio, y este sacrificio es algo material.
C. EL RESULTADO (Como última carta)
Sabe que sus visiones (creaciones espirituales) son solo verdaderas para usted. Nadie puede comprarlas, ni pueden ser vendidas a nadie más. Les gusta tener su propio estilo, "hecho a mano" por decirlo así.
La imagen de esta carta nos muestra a un personaje religioso que recibe los presentes de sus discípulos, esta ofrenda parece chocante. Cuando menos extraña que una persona entregada a la vida espiritual tenga la necesidad de ser reconocida de esta forma tan evidente. No obstante esta carta lleva el título de “Materia y Espíritu” y a la dificultad de congeniar o equilibrar estas energías.
La espiritualidad como fuente de riqueza. Las sectas religiosas. La buena vida y el deseo de la vida fácil. Enriquecerse con la religión. Deseo de popularidad y reconocimiento.
El maestro necesitado.
Se trata de una persona de sentimientos expansivos, amable, sensible y bondadosa. Pero también tiene una gran necesidad de popularidad, le gusta la ostentación y sobre todo la vida fácil. Son personas que tienen un gran deseo de ser amados y reconocidos. En el aspecto negativo utilizan estas aptitudes para convertirse en líderes de aspectos fundamentales de la vida, les gusta de la experiencia religiosa y se aprovechan de su popularidad para obtener beneficios propios. Para estas personas el placer puede convertirse en un dios.
Indica una situación donde se saca provecho de una disposición espiritual. Tal vez nos sintamos atraídos por aspectos esenciales y profundos de la vida y alguien se aprovecha de nosotros, o tal vez somos nosotros los que nos aprovechamos de una persona que necesita el consuelo en un momento delicado, nos abre el corazón y nosotros buscamos una recompensa. También aquí esta presente la posibilidad de sentirnos únicos, como dioses y que los demás deben pagar un tributo por nuestro desahogo. Indica la espiritualidad como negocio, tal vez con la venta de libros espirituales o religiosos. En un orden más peligroso nos advierte que la búsqueda religiosa muchas veces conduce a verse involucrado en alguna secta religiosa que nos perjudica la libertad.