Inicios e historia del tarot egipcio
Se dice que el dios egipcio Thot, quien poseía gran sabiduría, hizo entrega a su pueblo de 78 láminas de oro como un regalo que contenía grandes secretos de la humanidad, el mismo desapareció al ser lanzado al río Nilo. Tiempo después fueron halladas en una pirámide de Giza, de ahí su gran adoración por ellas.
Para la época, los egipcios se valían de la adivinación e interpretación con el fin de encontrar respuestas a todas sus inquietudes sobre la vida, qué pasaba después de la muerte o las reacciones de la naturaleza. Creían en seres y dioses mitológicos que estaban conformados por humanos con partes de animales como gatos o reptiles.
En los descubrimientos arqueológicos se descubrió que sus creencias sobre la vida después de la muerte y toda su simbología estuvieron tan bien forjadas que organizaban grandes y lujosos rituales en los funerales, los cuales podían involucrar enterrar a quien dejaba la vida real junto con sus joyas y mascota, para que siguiera disfrutándolos en lo que sea que le deparara el siguiente plano. Además, de otros tantos rituales, representaciones y escritos, los cuales pasaron a formar parte de su simbología y que sirvieron de inspiración para formar esta baraja.
¿Cómo funciona el tarot de los egipcios?
Cada ilustración en las cartas será interpretada de forma distinta según la persona, en cada una de ellas hay tres divisiones de la siguiente manera: parte superior, central e inferior. La parte superior simboliza el interior de la misma persona, un plano místico o espiritual de esta, se muestra en la parte central, representada a través de imágenes de humanos y las acciones de personas en su vida diaria, y la de la parte inferior son los actos que podrían traen consecuencias.
Una de las tantas formas de hacer una lectura de cartas egipcias consta de seis cartas dispuestas en forma de pirámide, tres en la base, dos en el centro y una en la parte superior, usándose solo los Arcanos Mayores, pudiendo llegar a predicciones respecto al futuro, personalidad, sentimientos, cambios de ánimo e incertidumbres en general.
En este tarot, la propia carta, cada símbolo y figura dispuesta en la misma, se lee de arriba abajo. De igual forma es relevante el orden de la tirada de las cartas porque será el que determine el orden de las respuestas dadas según las diferentes etapas de la vida.
El tarólogo o taróloga debe tener sabiduría, para así aportar enriquecimiento a la adivinación y poder vincular las ilustraciones de cada carta junto con la vida y dudas que se tengan al respecto.
Asimismo, se debe mantener un ambiente tranquilo, silencioso y pacífico; teniendo todo lo anterior en cuenta se obtendrán predicciones claras, la mezcla perfecta entre lo real y otros planos, también de varios aspectos como el pasado, el presente y el futuro.
Cómo se componen las cartas del Tarot Egipcio y su simbología
El tarot de los egipcios está compuesto por 78 cartas que se dividen en dos grupos, Arcanos Mayores y Arcanos Menores. Arcanos Mayores Este grupo se compone por 22 cartas numeradas, en la lectura tienen gran importancia cada una de ellas. Al hacerla se disponen 4 de estas cartas. Para los Arcanos Mayores, se toma en cuenta la parte superior, central e inferior de cada carta, para así obtener una interpretación completa con cada parte representada en la ilustración, es decir, en cada una se encuentra variedad de simbolismos.
Las cartas
Existen dos cartas utilizadas para definir a las personas, si es un hombre se utiliza la carta I. El Mago – El Hombre, y si es mujer la II. La Sacerdotisa – La Mujer del Mago.
Siguen en su orden: III. La Emperatriz – Madre Divina, IV. El Emperador, V. El Jerarca – El Rigor – La Ley, VI. La indecisión – El Enamorado, VII. El Triunfo – El Carro de guerra y VIII. La Justicia – El Arcano de Job, estas 6 cartas están inspiradas por la creación del mundo.
IX. El Ermitaño – La Inacción, X. La Retribución – La Rueda de la Fortuna, XI. La Persuasión – El León Domado y XII. El Apostolado – El Sacrificio, simbolizan los puntos cardinales.
XIII. La Inmortalidad – Muerte y Resurrección, XIV. La Templanza – Matrimonio, asociación, XV. La Pasión – Tifón Bafometo, XVI. La Torre Fulminada – La Fragilidad, XVII. La Esperanza – La Estrella, XVIII. Crepúsculo – Enemigos Ocultos, XIX. La Inspiración – El Sol Radiante, XX. La Resurrección, XXI. El Regreso – La Verdad – La Corona de la Vida y XXII. El Loco representa diversos estados de la vida.
Arcanos Menores
Simbolizan distintos aspectos de la vida diaria, son 56 cartas que complementan a los arcanos mayores. Al igual que las demás están enumeradas, partiendo de la XXIII. El Labrador hasta la LXXVII. El Renacimiento, en cada carta se puede presenciar un símbolo egipcio, tres planos: plano espiritual, plano mental y plano físico, una letra hebrea, el planeta y el signo al que pertenece, junto con el nombre de la misma.
Según su lectura, cada una tiene un significado positivo o negativo, esto varía si se interpreta al derecho o invertida según salga en la tirada. Asimismo, los arcanos presentan una simbología en sus números, del 1 al 10, desde el bien, el mal, unidad, poder, consecuencias, entre otros.
¿Te gustaría aprender a interpretar el Tarot Egipcio?
Ponte ya en contacto con nosotros haciendo clic aquí:
