La historia del anillo atlante (egipcio) es tan fascinante como sencilla. Comerciantes sin escrúpulos —pero no los vendedores de feria que no saben lo que tienen— han venido confundiendo y distorsionando su diseño e historia en las últimas décadas. El anillo original atlante (egipcio) es propiedad de la familia Belizal de Francia. Desde las arenas de los tiempos, este anillo protector llegó a manos del radiestesista André de Belizal gracias a su mujer Geneviève que lo heredó de su abuelo el Marqués Armand-Arthur de PRADIER d´Agrain. André lo estudió en profundidad a mediados del siglo pasado perfeccionándolo en sumo grado. El original se halló desgastado y roto debido a su antigüedad, y ya no era suficientemente efectivo.
La versión original de este anillo está hecho en greda (tipo de arcilla) fue descubierta en Egipto y al parecer no es el anillo en sí lo que genera los “poderes especiales” sino la forma geométrica grabada en él; una serie de motivos geométricos dos triángulos, tres grandes y seis pequeños rectángulos en forma semi-cilíndrica. En la punta de los triángulos, el anillo es perforado y los dos agujeros se unen gracias a un surco grabado en el interior, sus proporciones y su distribución, es lo que le profería facultades especiales.
Cuando dos personas llevan el anillo Atlante verán aumentar su conexión psíquica y aumentar su unión, llegando a episodios de comunicación telepática.
El uso del anillo Atlante es algo totalmente personal, debido a que se impregna de las radiaciones de su portador, no debe ser tocado por nadie más, si alguien lo toca debemos dejarlo en un recipiente con agua y sal marina durante al menos 48 horas, es conveniente que le dé el sol y que recoja también los rayos de la luna.
De la misma forma, el sol siempre es beneficioso para la recarga de su anillo, por lo que es recomendable exponerlo a él de forma regular, o al menos cada 3 meses.
Si en alguna ocasión no podemos llevarlo puesto, es muy útil dejarlo en algún lugar, sobre nuestra propia fotografía, no podrá dejarlo sobre la fotografía de otra persona, a menos que ella le dé permiso explícito.
Es beneficioso también llevarlo con un cordón, colgando del cuello, pues lo situaremos en contacto con nuestra piel, cercano a nuestros órganos internos.
El anillo atlante beneficia también a animales y plantas domésticas, que se encuentren en un estado delicado.
Cuando dos personas llevan el anillo Atlante verán aumentar su conexión psíquica y aumentar su unión, llegando a episodios de comunicación telepática.
Cada persona que usa un anillo atlante, tiene una experiencia distinta. O sencillamente, no la tiene. Es muy importante acotar que el anillo atlante es una herramienta de poder, sin embargo es prudente recordar dos cosas fundamentales, la primera que es una herramienta, es la extensión de tu poder y la segunda es que el poder se lo otorga el portador. El anillo es una extensión del poder, no es el poder, es un instrumento, un símbolo, una representación, no se debe depender del anillo, el anillo debe depender de nosotros.
El anillo Atlante llegó a nuestro poder a través de los egipcios, que lo recibieron directamente de la civilización Atlante, a través de su casta sacerdotal.
En el interior presenta un grabado llamado Lemniscata, representa los cuatro aspectos de la persona, el aspecto psíquico, el físico, el espiritual y el energético. Simboliza la influencia que tiene el pasado y el futuro sobre nuestro presente.
Según las circunstancias, podemos variar su influencia del anillo sobre el organismo cambiándolo de dedo: