Una piedra natal es una gema que se asocia con un mes del año en particular, de ahí que haya una que se corresponda con tu fecha de nacimiento y que pueda arrojar luz sobre ciertos aspectos de tu personalidad de la misma forma que los signos del Zodiaco.
Los primeros en establecer una conexión entre ciertas piedras y los meses del año fueron los eruditos cristianos del siglo V. Se basaron en las 12 piedras del pectoral bíblico de Aarón, un complemento sagrado que, según el Éxodo, solía vestir el Sumo Sacerdote de los israelitas. Los eruditos teorizaron que cada piedra se correspondía con un mes del año y un signo del Zodiaco y que se beneficiarían de las propiedades de cada una si las portaban durante el periodo correcto.
Al principio, los creyentes llevaban una piedra diferente cada mes, cada una con sus propiedades únicas. Esta práctica fue evolucionando con el tiempo, de forma que llevar la piedra correspondiente a tu mes de nacimiento durante todo el año se convirtió en algo habitual. Así es como estas gemas pasaron a conocerse como piedras natales.
Durante siglos, hubo varias discrepancias sobre qué piedras debían corresponderse a cada mes. La disputa acabó por resolverse en 1912, cuando la empresa Sears publicó una lista "oficial" que pasó a ser la más ampliamente aceptada.
Desde entonces ha permanecido más o menos igual y tan solo se le han realizado pequeños ajustes.
Enero: granate - El granate es una piedra de color rojo oscuro que se asocia con la protección. El nombre proviene de una palabra latina que significa "similar a una semilla", ya que su color y aspecto recuerdan a las semillas de la granada. Su asociación con la protección se remonta a la Antigüedad. Los viajeros solían llevar granates encima durante los viajes para protegerse contra los espíritus malignos y la mala suerte. Los aztecas, por su parte, solían llevarlos consigo a las batallas. El granate también se asocia con la vitalidad y la pasión en todo tipo de relaciones. Los nacidos en enero forjan conexiones estrechas con quienes los rodean, derrochan amor y no les da miedo demostrarlo.
Febrero: amatista - La amatista tiene una historia interesante que se remonta a la mitología griega. Dioniso, el dios del vino y la fiesta, se sintió insultado por los mortales después de que estos rechazasen su hospitalidad y decidió tomarla contra la primera persona se cruzó en su camino. La víctima resultó ser una joven devota llamada Amethystos, nombre que significa "no ebria". Dioniso se apiadó de ella y, en lugar de destruirla, la convirtió en piedra. Amethystos se convirtió en una estatua de piedra blanca. Dioniso se sintió conmovido por su inocencia y le rindió tributo echándole la copa de vino que tenía en la mano por encima en lugar de bebérsela. Esto hizo que la piedra adquiriese un color morado intenso. A raíz de esta leyenda, la amatista pasó a asociarse con este momento puntual de sobriedad y consideración del hedonista Dioniso, por lo que hoy en día se la vincula a la sabiduría. Aunque la amatista no hace que los nacidos en febrero tengan una tolerancia sobrenatural al alcohol, sí refleja varias de sus cualidades, como la claridad mental, la espiritualidad y la curación.
Marzo: aguamarina - La hermosa aguamarina refleja las diferentes tonalidades del mar y el cielo. De hecho, se la ha asociado a estos elementos de la naturaleza durante generaciones y solía acompañar a los marineros en sus travesías. Se decía que tenía varios beneficios, desde favorecer el descanso hasta crear armonía en el matrimonio. En última instancia, se la suele asociar con la serenidad. Se cree que esta gema tiene propiedades calmantes, por lo que es el regalo ideal para alguien que está a punto de casarse, sobre todo por su particular asociación con la felicidad en el amor. Hoy en día simboliza la salud, la honestidad, la lealtad, la esperanza y la juventud.
Abril: diamante - La piedra natal de abril es el diamante, la piedra preciosa más querida y codiciada del mundo. Los diamantes se formaron hace unos 3,3 mil millones de años a más de 160 km bajo la superficie terrestre. Se los conoce por ser increíblemente duros y resistentes, lo que explica por qué son tan populares en el mundo de la joyería. ¿Pero qué significan? El diamante representa el amor, otra razón más por lo que es tan popular en los anillos de pedida. Se lo asocia con la pureza, la franqueza y la unidad, rasgos que también suelen caracterizar a los nacidos en abril.
Mayo: esmeralda - Mayo es el mes de la esmeralda. Esta gema de color verde oscuro solía extraerse en Egipto hace más de 2000 años y formaba parte del vestuario de Cleopatra. Su color vital y terroso recuerda a los campos y los bosques, lo que a su vez evoca la primavera y la renovación. Se la considera un símbolo de esperanza. Esta asociación también vincula a la esmeralda con la juventud y el renacimiento, así como a la sabiduría. En su día se creía que los que portasen esta gema gozarían de una gran inteligencia e incluso de la capacidad de predecir el futuro.
Junio: perla - La perla es la única piedra natal de la lista que crece dentro de un ser viviente. Al formarse en las ostras de agua salada o en las almejas de agua dulce, se la considera un bien muy preciado. Su color y textura lisa han hecho que se la vincule a la pureza, la honestidad y la sabiduría. Las perlas también han estado asociadas con lo divino desde hace siglos, ya que en algunas culturas se cree que son las lágrimas de los caídos del cielo. En la mitología de la antigua China, los dragones portaban perlas y estas representaban el poder y la sabiduría. Hoy en día se las considera un símbolo de estatus y riqueza, pero para los nacidos en junio es un recordatorio de su sabiduría y fuerza interior.
Julio: rubí - Esta piedra de color rojo sangre ha fascinado a la humanidad desde que el mundo es mundo. Evoca la vitalidad y se la asocia con la fuerza y la salud. Los rubíes se han utilizado para decorar vasos y cálices durante siglos, reforzando el poder y el significado de los brindis por la buena salud. El rojo es un color que también se vincula a la pasión y las emociones fuertes en general. Por esta razón, el rubí es una gema que se asocia con el amor. Se cree que los nacidos en julio derrochan energía, amor y vitalidad.
Agosto: peridoto - El peridoto, con su color verde oliva único, es una gema que se asocia con la belleza. Esto podría aplicarse a cualquier otra piedra natal de la lista, pero el peridoto es especialmente delicado y llamativo. Algo que también hace que esta gema sea tan particular es que tiene el mismo brillo tanto bajo la luz natural como la artificial. Esto lo hacía especialmente valioso en el antiguo Egipto, donde se extraía. Se lo apreciaba por su gran belleza, la cual no se desvanecía a medida que se acercaba la noche. Por lo tanto, se cree que protege a quien lo porta de la oscuridad.
Septiembre: zafiro - El color azul oscuro del zafiro se asocia con la honestidad, una cualidad que suelen tener los nacidos en septiembre. Se cree que esta piedra tiene el poder de alejar el mal de ojo y el daño físico. Los zafiros azules también son piedras altamente espirituales, por lo que han adornado las vestimentas de los líderes religiosos durante siglos. Representan la fe, la sabiduría, la confianza y la lealtad, cualidades que todos buscamos en nuestra vida personal y espiritual.
Octubre: ópalo - El ópalo es una piedra única, ya que puede adquirir muchas tonalidades. Su apariencia, por lo tanto, se vincula a la luz y la magia, pero también a la curación (sobre todo a la de los ojos). En el pasado, había quienes creían que tenía la capacidad de volver invisible a la persona que lo portase. Se cree que el ópalo también atrae la buena suerte por la forma que tiene de difractar la luz y jugar con todos los colores del arcoíris al mismo tiempo. ¡Es un regalo estupendo para los nacidos en octubre!
Noviembre: citrino - Esta piedra de color amarillo brillante representa la alegría. Su tonalidad dorada parece canalizar la energía del Sol, favoreciendo la felicidad y la curación. El citrino es una variedad rara de cuarzo y solo se ha descubierto en unos pocos países. Se cree que el citrino ayuda a aliviar los problemas físicos y mentales, calmando el estrés y curando los dolores estomacales. Al igual que esta piedra, los nacidos en noviembre pueden irradiar luz y alegría allá a donde vayan.
Diciembre: turquesa - La última piedra de la lista es la turquesa, una gema única en el sentido de que inspiró el nombre de un color y no al revés. Se la suele asociar con Turquía, ya que fueron sus habitantes los que la trajeron a Europa. De hecho, turco en francés se dice turquoise. En la cultura turca, se creía que regalar una turquesa a alguien haría que esta persona tuviese la capacidad de hacer amigos con facilidad. Por lo tanto, hoy en día se la asocia con la amistad.