Calcular las profecciones anuales

El método, que se originó con la tradición helenística de la astrología, se remonta al siglo II a. C., y equipara cada casa de una carta natal con una edad particular.

Ya sea que se trate de un nuevo año calendario o de que cumplas un año más, pensar en lo que pueden deparar los próximos 12 meses puede ser realmente emocionante y, bueno, un poco abrumador.

Quizás te preguntes si tu vida amorosa está a punto de cambiar o si una nueva oportunidad profesional está a la vuelta de la esquina. Tener una pequeña idea de los temas que dominarán tu año puede ser central y ahí te pueden ayudar las profecciones anuales, un método predictivo cada vez más popular en astrología.

Las profecciones son un método de la astrología helenística para determinar los temas más relevantes en la vida de una persona de acuerdo con su carta natal. Las profecciones se calculan anualmente y son cíclicas, se repiten cada 12 años, volviendo a empezar desde el ascendente.

Un repaso de las casas: al igual que con muchos conceptos de astrología, es útil tener una imagen. Y la mejor imagen posible para este ejercicio es tu propia carta natal. A partir de ahí, ten en cuenta que el gráfico se divide en 12 sectores. Cada uno de estos cortes representa una casa, y la primera casa es donde su signo Ascendente (el signo que ascendía en el horizonte oriental en el momento de su nacimiento) cae en el lado izquierdo del gráfico.

Las profecciones nos ayudan a reducir la cantidad de temas que pueden ser relevantes para cada uno y anticipar movimientos o planear acciones concretas (hay muchos tránsitos en el cielo durante un año). El tema que tocaremos hoy se trata de las temáticas por casa.

Al ser una técnica basada en la astrología helenística, usamos solo los 7 planetas tradicionales y sus dignidades esenciales. Urano, Neptuno y Plutón no son considerados en este proceso, así que no podrán ser “señores del año” o regir alguna de las casas.

Así mismo los significados de las casas varían un poco con respecto a la astrología tradicional, exploremos los diversos temas que trae cada año dependiendo de la casa:

Casa I — Apariencia, identidad, ser, el cuerpo del consultante.

Casa II — Dinero, finanzas, salario, sustento, mundo material

Casa III — Hermanos, familia no directa, comunicación, lo local, educación, viajes cortos

Casa IV — Hogar, familia, padres, ancestros

Casa V — Hijos, sexualidad, creatividad, embarazos

Casa VI — Lugar de trabajo, colegas, salud, enfermedades, enemigos conocidos

Casa VII — Relaciones, matrimonio, divorcio, sociedades

Casa VIII — Deudas, dinero de otras personas, herencias, muerte

Casa IX — Religión, espiritualidad, viajes largos, educación superior

Casa X — Carrera, lo público, jefes, prestigio y reputación

Casa XI — Amigos, grupos, sociedad

Casa XII — Reclusión, retiros, aislamiento, soledad, prisiones, enemigos ocultos

Ahora que sabes los temas de cada casa, es cuestión de:

• Mirar al pasado y ver cómo se manifestaron esos temas en tu vida en la profección anterior y qué asuntos salieron a flote. Por ejemplo, si tienes 36 años, puedes revisar qué pasó cuando tenías 24 o 12 años para encontrar temas comunes porque estas edades comparten profección con la casa 1 en tu carta.     
• Planea a futuro y tratar de plantear una relación desde el presente. ¿Qué puedo hacer para aprovechar ese periodo? ¿Qué planetas están en mi carta y son activados por esa profección? Recuerda que los planetas que se encuentran en tu casa activada (no solo el regente) se activan también y pueden favorecer o afectar lo que planees durante el año. Por ejemplo, si tienes 30 años, tu profección es casa VI, pero en tu carta natal tienes a Saturno en ella, Saturno y el planeta que rija esa casa estarán activados juntos, por lo tanto, tendrás que considerar si Saturno es el maléfico de secta o fuera de ella y qué tanta potencia tiene.     
• Vivir la vida con base en tu carta. Cuando entiendes los ritmos de las profecciones puedes darle un enfoque particular a los temas y aprovechar los favores que te da la astrología. Si estás en una profección de casa V, aprovecha para enfocarte en esos temas que trae: tus hijos si los tienes, la manera en que pasas tu tiempo de ocio, encontrar un nuevo hobby o hacerlo más serio, trabajar y explorar tu sexualidad…

Trabajar con profecciones es uno de mis aspectos favoritos de la astrología, muchas veces nos distraemos o nos negamos a ver los ciclos en nuestra vida, complicándonos más de lo que deberíamos.

Las profesiones anuales pueden resonar contigo e inspirar una ola completamente nueva de autoaprendizaje apasionado, o puede que te resulte un poco abrumador.

De cualquier manera, debes saber que es solo una de las muchas técnicas de predicción astrológica con las que puedes experimentar. Y si alguna vez buscas más apoyo, trabajar con un astrólogo profesional podría ser tu mejor opción para aprender más sobre lo que te espera este año.